En una
jornada con una participación de más 75%, los panameños eligieron además de
presidente para los próximos cinco años, 71 diputados y los gobiernos locales
Mulino, de 64 años y quien
aparecía a la cabeza de las pocas encuestas difundidas antes de las votaciones,
fue designado a última hora por el TE como candidato presidencial de la alianza
de los partidos Realizando Metas (RM) y Alianza, en sustitución de Martinelli,
que quedó inhabilitado por una condena a más de diez años de prisión por
blanqueo de capitales.
En el segundo lugar quedó Ricardo
Lombana, el candidato antisistema del novel Movimiento Otro Camino (Moca), con
el 24,5 % de los votos, y en el tercer lugar el expresidente Martín Torrijos
(2004-2009), abanderado del minoritario Partido Popular (PP), con el 15,8%.
Influencia de Martinelli
La elección se celebró en
momentos en que Panamá sufre los embates de una arraigada corrupción, de una
sequía que redujo el tránsito de buques por el canal, motor de su economía, y
una ola de migrantes que cruza su peligrosa selva del Darién rumbo a Estados
Unidos.
Estos comicios estuvieron
marcados por la influencia de Martinelli, quien designó a Mulino como su
sustituto cuando fue inhabilitado como candidato por su partido, tras confirmarse
su condena.
En una jornada con una
participación de más 75%, los panameños eligieron además de presidente para los
próximos cinco años, 71 diputados y los gobiernos locales.
«Misión cumplida carajo»
«Este que está aquí no es títere
de nadie (…) Yo no estoy aquí porque me puso alguien», dijo Mulino durante su
primer discurso de victoria en un hotel de Ciudad de Panamá, en medio del
júbilo de sus seguidores.
«¡Misión cumplida, carajo (…),
misión cumplida Ricardo (Martinelli)!», proclamó el triunfador. «No me animan
confrontaciones de ningún tipo», aseveró al asegurar que buscará el consenso
político y que impulsará «un Gobierno pro empresa privada», pero sin olvidar a
los más necesitados.
Fue enérgico en su discurso al
referirse que en su gobierno «se acabó la persecución política, se acabó la
manipulación del Ministerio Público, se acabó la manipulación de jueces y
magistrados. A partir del 1 de julio se recobrarán las llaves de los candados
que han tenido presos, dañando reputaciones sin vergüenza».
«Un abrazo Ricardo (Martinelli)
hasta allá donde estás. Como dije se acabó la persecución política en este
país, el país está harto de las peleas politiqueras que no nos han conducido a
nada bueno, no me considero enemigo de nadie, y espero que nadie me considere
su enemigo», subrayó.
Prometió hacer un gobierno
centrado en buscar un Panamá mejor para los panameños.
«Impulsaremos un gobierno pro
inversión, pro empresa privada, pero sin olvidar a los que tienen hambre, a los
que quieren un empleo y de los que necesitan agua potable en todo el país todos
los días», remarcó.
Reconoció que lo que viene en el
futuro «son retos muy grandes», pero que los afrontará con decisión y
liderazgo, «qué es lo que le falta a este país».
«Los problemas son enormes, pero
tengo toda la voluntad del mundo para echarlos a andar y tomar las decisiones
que este país está esperando en los próximos meses», apuntó.