El viernes de la
semana pasada se vivió una escena inédita en una carretera de la provincia
española de Lleida, cuando un apicultor de 70 años atacó a unos agentes de los
Mossos d’Esquadra, la Policía regional catalana, soltando las abejas que
portaba en su furgoneta.
Todo comenzó a la
una de la tarde, cuando la pareja de agentes durante un control rutinario en la
población de Cervera dio el alto a un conductor que circulaba sin usar el
preceptivo cinturón de seguridad, informan medios locales.
«Os tendría que
haber pasado por encima», soltó el hombre, lo que hizo sospechar a los
uniformados que se podría encontrar bajo los efectos del alcohol. Ante la
posibilidad, procedieron a realizarle un test de alcoholemia, que arrojó un
resultado de 0,38 miligramos por litro de sangre.
En España la tasa
máxima permitida es de 0,25 miligramos por litro, y superarla acarrea una
sanción mínima de 500 euros de multa y la pérdida de 4 de los 12 puntos del
carné de conducir.
Los agentes
tuvieron que ser tratados con cortisona
A partir de ahí
la situación se agravó. Los agentes le requirieron para someterse a una segunda
prueba, pero el hombre se negó gritándoles: «¡Ahora os mataré!». En ese punto
se dirigió a la parte trasera de su furgoneta y liberó las abejas que portaba.
Al ser picados
por los insectos, los policías se refugiaron en un restaurante cercano, donde
fueron atendidos por los clientes y solicitaron refuerzos. Una segunda patrulla
se desplazó hasta el lugar de los hechos y consiguió detener al septuagenario.
Los dos Mossos
atacados por las abejas tuvieron que ser trasladados a un centro de atención
primaria, donde fueron atendidos sanitariamente y les administraron cortisona
para tratar las reacciones alérgicas a las picaduras.
El hombre fue
arrestado y puesto en libertad pocas horas después tras declarar en comisaría,
si bien está acusado de atentado contra la autoridad.
Fuente: RT
