Este miercoles se
conoció que los envíos marítimos de mercancía dedicados al servicio puerta a
puerta en Venezuela a través de couriers se encuentran suspendidos hasta nuevo
aviso, mientras las autoridades venezolanas avanzan en un proceso de
investigación administrativa.
Las agencias han
manejado el anuncio en privado con sus clientes, quienes fueron notificados a
través de correos electrónicos con la decisión en la última semana.
Se conoció que
los encargados de las compañías también se han reunido con el personal para
manifestarles las directrices recibidas desde el Gobierno venezolano, que en
principio no afectará el servicio aéreo.
La medida
obedecería a nuevas regulaciones de las entidades aduaneras, así como nuevos
lineamientos que impactarán directamente en el servicio, según les informó a
los involucrados una de las empresas dedicadas al transporte de mercancía
personal y jurídica desde Estados Unidos a Venezuela.
El pasado 30 de
junio se venció la Gaceta Oficial que exoneraba el 90% de los aranceles
aduaneros y el 90% del Impuesto al Valor Agregado para los productos
importados, incluidos en los 1.567 códigos arancelarios listados. Si bien se
trataba de una reducción en el número de códigos y exoneración, se daba
continuidad a una medida implementada desde hace cuatro años con respecto a los
bienes importados terminados.
El 1 de julio fue
publicado el nuevo oficio extraordinario bajo el número 6.750 con la prórroga
para el decreto de exoneraciones, que tendrá vigencia hasta el próximo 31 de
diciembre, desestimando cambios en la normativa hasta el momento.
Sin embargo, otro
de los couriers con envíos desde España le comunicó a sus trabajadores que el
proceso de suspensión obedece en sí a una investigación por evasiones fiscales
y cobros adicionales irregulares detectados por el organismo aduanero, lo que a
su vez impulsará la creación de un nuevo sistema de carga, divididas entre
cajas marítimas personales y cargas de empresa, el que podría ser comunicado en
los próximos días.
Decenas de
compañías de envíos serían perjudicadas con esta decisión de suspensión y
nuevos procedimientos.
Es importante
mencionar que una compañía dedicada al servicio desde China a Venezuela, fue
acusada de no cumplir con los tiempos de entrega así como de la retención de
contenedores en los puertos venezolanos con mercancía de más de 120 usuarios.
Latimcargo, una
empresa de capital venezolano con sede en Guangzhou, China, además señalada de
haber retirado su sede en Caracas, ha indicado a través de sus redes sociales
que atraviesa una situación de falta de liquidez así como la renuncia de uno de
los socios prioritarios, lo que descapitalizó a la agencia.
Los afectados que han insistido en elevar la denuncia a la Fiscalía General y la Defensoría del Pueblo han vinculado lo ocurrido con la suspensión de envíos marítimos por el resto de las compañías mientras obtienen respuestas por sus casos, que suman más de 50 contenedores.
Ni representantes
de la Fiscalía ni del Servicio Nacional Integrado de Administración Aduanera y
Tributaria (Seniat) respondieron a solicitud de comentarios hecha por Bloomberg
Línea.