El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, ha calificado la acción iraní de «totalmente inaceptable» y ha pedido a los países de todo el mundo que lo condenen.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha ordenado a su
Ejército que intercepte los misiles dirigidos a Israel durante el ataque
lanzado por Irán este martes.
La Guardia Revolucionaria iraní ha confirmado el lanzamiento
de cientos de misiles balísticos como respuesta a los asesinatos del líder de
Hamás, Ismail Haniyeh, y el jefe de Hizbulá, Hasán Nasrala, y un general iraní.
Según Washington, la ofensiva «no ha sido eficaz» y, al menos por ahora, no se
han reportado muertes del lado israelí.
«Sabemos que el ataque no ha sido eficaz, no ha sido
efectivo gracias a las fuerzas de Israel y EE.UU. y a un meticuloso plan para
anticipar el ataque», ha indicado el Consejero de Seguridad Nacional de la Casa
Blanca, Jake Sullivan, que ha adelantado que Washington se mantiene en contacto
con Tel Aviv para elegir cuales serán las consecuencias ante lo que ha
denominado una «escalada significativa de Irán».
El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken,
ha calificado la acción iraní de «totalmente inaceptable» y ha pedido a los
países de todo el mundo que lo condenen.
«Irán, por segunda vez en cinco meses, lanzó un ataque
directo contra Israel, incluido el lanzamiento de unos 200 misiles balísticos.
Esto es totalmente inaceptable y el mundo entero debería condenarlo», ha
indicado el jefe de la diplomacia estadounidense en una rueda de prensa.
Estados Unidos, principal aliado de Tel Aviv, había
advertido esta mañana de un ataque «inminente» desde Irán y ha prometido
«severas consecuencias». En los últimos días, ha aumentado su presencia en la
zona y este martes había enviado varios escuadrones de combate. Poco antes de
confirmarse el ataque, Biden ha dicho que EE.UU. está «preparado» para defender
a Israel.
Por su parte, la Embajada de Estados Unidos en Jerusalén ha
ordenado a todo su personal «resguardarse hasta nuevo aviso» tras el ataque.
«Como resultado de la actual situación de inseguridad, la Embajada de Estados
Unidos ha ordenado a todos los empleados del gobierno estadounidense y sus
familiares que se resguarden en sus hogares hasta nuevo aviso», ha informado en
un comunicado.