Once venezolanas,
una de ellas menor de edad, fueron rescatadas este 27 de junio de tres
inmuebles situados en Guayaquil (Ecuador) que funcionaban como prostíbulos y en
los que eran explotadas sexualmente, según anunció la Policía Nacional
ecuatoriana, que detuvo en el operativo a tres venezolanos como presuntos culpables
del delito, informó EFE.
El operativo se
llevó a cabo tras una investigación iniciada en febrero, después de que se
interviniese otro prostíbulo donde fueron rescatadas tres menores de edad,
víctimas de explotación sexual, y se detuviesen a otras dos personas, explicó a
periodistas el jefe de la Unidad Nacional de Trata de Personas de la Policía,
Edwin Íñiguez.
«(Ellas) eran
coaccionadas a realizar esta actividad. Las tenían encerradas en el inmueble en
muchos casos y sometidas a maltrato si no aceptaban ciertas actividades de índole
sexual. Eran amenazadas y mantenían una deuda permanente con sus captores»,
comentó el jefe policial.”
Arma incautada
Algunas de las
víctimas habían sido captadas en Ecuador y otras habían sido reclutadas desde
Venezuela, quienes aceptaban que los proxenetas les pagasen el viaje, lo que
les generaba una deuda que, una vez en Ecuador, nunca terminaban de saldar.
Ese es el caso de
la menor de edad rescatada, de 15 años, quien fue trasladada a un centro de
acogida a la espera de determinar su situación, pues se desconoce aún si cuenta
con parientes en territorio ecuatoriano.
«Muchas de las
chicas sabían a lo que venían. La actividad sexual no es un delito (en
Ecuador), pero sí las circunstancias en las que se desarrollaba. Una vez que
ingresaban (a los inmuebles), no les dejaban salir, o si salían eran
controladas. La deuda que mantenían se volvía impagable hasta cierto punto»,
incidió Íñiguez.
En uno de los
inmuebles intervenidos fue hallada un arma de fuego, entre otros indicios
recopilados por la Policía para sustentar las investigaciones.