En un llamado
directo a Estados Unidos, el gobierno ruso exigió el cese de las
"presiones" y alertó sobre el riesgo de una "permanente tensión
nuclear" que amenaza la estabilidad global.
La declaración,
emitida por el viceministro de Exteriores ruso, Serguéi Riabkov, este domingo
10 de agosto, subraya la creciente preocupación de Moscú por lo que considera
una escalada de la retórica y las acciones hostiles por parte de Washington,
informó EFE.
"El tira y
afloja, las acciones impulsivas, la presión (...), vemos que en Washington hay
una tendencia a actuar a través de la presión. Pero creo que ahora es el
momento de dar una oportunidad para que hablen los políticos y
diplomáticos", comentó en declaraciones a la televisión pública.
Rusia: "se
necesita voluntad política"
El portavoz del
Ministerio de Exteriores, de cara a la cumbre ruso-estadounidense que se
celebrará el 15 de agosto en Alaska, expresó que lo que el mundo necesita en
estos momentos de conflicto es "voluntad política para reducir la
temperatura de estas recalentadas relaciones internacionales".
“Por lo menos, en
el diálogo con EE.UU. surgen algunos brotes verdes de sentido común que tanto
se echaron de menos en los últimos meses y años”, explicó.
Una tensión
nuclear a punto de explotar
Durante su
intervención, el diplomático ruso también advirtió que “el riesgo de conflicto
nuclear se mantiene” y que la tensión estratégica “no disminuye".
Esto en
referencia a las sanciones económicas impuestas, el aumento de la presencia
militar de la OTAN en las fronteras de Rusia y el despliegue de sistemas de
misiles en Europa del Este.
“Nosotros no
somos los iniciadores de pasos de escalada. Nosotros tomamos medidas para
contrarrestar y así seguiremos de aquí en adelante”, dijo luego de que Moscú
levantara la moratoria al tratado INF de eliminación de misiles de corto y
medio alcance.
Trump y Putin se
reúnen
El presidente
ruso, Vladímir Putin, aceptó reunirse con su homólogo estadounidense, Donald
Trump, tras un ultimátum de diez días impuesto por este último para poner fin a
la guerra en Ucrania.
De acuerdo con
expertos políticos, uno de los temas centrales de la cumbre será la seguridad
estratégica, dado que el último tratado de desarme entre ambas potencias, el
START III, expira a principios de 2026.
Este asunto ya se
había abordado en el anterior encuentro de los dos mandatarios en junio de
2018, en Helsinki.
El gobierno ruso
reiteró su disposición a mantener conversaciones con la administración
estadounidense para encontrar soluciones a las diferencias existentes.