La comunidad
educativa de los estados Barinas y Trujillo vive días de incertidumbre y
preocupación tras registrarse, en menos de una semana, varios episodios de
presunta intoxicación masiva en instituciones escolares públicas. Los hechos
han dejado decenas de afectados entre estudiantes, docentes y personal
administrativo, generando alarma en padres y autoridades locales.
Ante esta
situación que implica la exposición de niños, adolescentes y personal escolar a
sustancias aún no identificadas, las autoridades sanitarias o educativas siguen
sin precisar las causas, el origen del agente involucrado ni el alcance real de
los afectados.
Cronología de los
incidentes
Los hechos más
recientes ocurrieron el lunes, 17 de noviembre. El primer episodio se produjo
en el Liceo 25 de Mayo, donde decenas de estudiantes y trabajadores comenzaron
a presentar síntomas de malestar.
Horas más tarde,
una situación similar se repitió en el Liceo Alberto Arvelo Torrealba, también
de educación media. Ese día, 65 personas fueron atendidas en centros de salud
de la ciudad.
Ambos episodios
implicaron la movilización de personal de salud y la atención simultánea en
múltiples centros asistenciales. Este tipo de abordaje suele indicar saturación
del sistema hospitalario cuando se presentan emergencias colectivas.
Los afectados
fueron trasladados a distintos centros de salud: Hospital General Dr. Luis
Razetti, Ambulatorio Los Pozones, Hospital Materno Infantil y Funsalud,
información confirmada por diversos medios el martes, 18 de noviembre pasado.
El colapso en la
capacidad de atención médica impidió precisar el número exacto de víctimas.
Padres y representantes denunciaron largas esperas y falta de información
oficial.
Para el día
miércoles 19 de noviembre, el diario Los Llanos reportó que incluso personal de
salud que atendió a los afectados manifestó síntomas.
Durante una
visita al Hospital Razetti, varios niños ingresados presentaron nuevamente
malestar, lo que incrementó la preocupación sobre la posible propagación de la
sustancia aún no identificada
Otros hechos
preocupantes
No obstante, aún
quedan casos por registrar y por esclarecer. Un ejemplo son los tres eventos
ocurridos este año en el liceo Colinas del Llano, ubicado en Ciudad Varyná,
parroquia Alto Barinas.
De acuerdo con el
reporte de una estudiante de la institución, quien pidió mantener su nombre en
el anonimato, los incidentes sucedieron en febrero con aproximadamente 40
afectados, en marzo con 15, y en octubre con 30.
Trujillo también
está en alerta
En el estado
Trujillo la situación es similar toda vez que en horas de la mañana del pasado
jueves 20 de noviembre, un grupo de ocho niños de la Escuela San Vicente de
Paul, del municipio Valera, fueron trasladados al Hospital Universitario Dr.
Pedro Emilio Carrillo tras presentar síntomas de intoxicación, entre ellos
dolor abdominal, vómito y pruritos.
Los menores
fueron recibidos por el equipo de guardia, la coordinadora del Departamento de
Epidemiología, además del personal de enfermería. El reporte oficial señala que
se inició de inmediato el proceso de estabilización y atención especializada.
Las autoridades
sanitarias se encuentran realizando las investigaciones correspondientes para
determinar las causas del incidente y garantizar el bienestar de los afectados.
A este incidente
se suma al los dos episodios similares que se habían registrado el día
anterior, 19 de noviembre, en la población de La Puerta, municipio Valera,
donde más de 70 estudiantes de dos instituciones educativas presentaron
síntomas de intoxicación.
En horas de la
mañana, 55 niños y una trabajadora del Colegio Privado Nuestra Señora de la Paz
fueron atendidos en el Ambulatorio CPT3 La Puerta, mientras que en la tarde
otros 20 alumnos del Colegio José Luis Faurè Sabaut también requirieron asistencia
médica.
En ambos casos,
los pacientes recibieron atención inmediata y fueron estabilizados, con algunos
referidos al Hospital Universitario Dr. Pedro Emilio Carrillo por precaución.
Impacto en la comunidad educativa
La situación ha
expuesto a niños, adolescentes, docentes, personal obrero y administrativo a un
agente desconocido, lo que ha generado temor en las familias y exigencias de
respuestas claras.
Padres y
representantes de los escolares solicitan la suspensión temporal de clases
hasta que se determine el origen de la intoxicación. Por su parte los docentes
y sindicatos advierten sobre la falta de protocolos de emergencia en los
planteles, mientras las autoridades sanitarias locales han iniciado
investigaciones, aunque hasta ahora no se ha identificado la sustancia
responsable.
Sistema de salud
bajo presión
El incremento de
casos ha puesto en evidencia las limitaciones del sistema de salud regional:
Hospitales
colapsados por la cantidad de pacientes.
Personal médico
afectado, lo que agrava la capacidad de respuesta.
Escasez de
insumos y equipos para atender emergencias de este tipo.
La comunidad
exige una investigación transparente que determine: El origen de la
intoxicación, las medidas de prevención necesarias para evitar nuevos episodios
y garantías de seguridad para el regreso a clases.
Mientras tanto,
el ambiente en Barinas es de temor y desconfianza, con padres que se niegan a
enviar a sus hijos a los liceos hasta que se esclarezca la situación.
Esta situación
refleja la gravedad de los hechos y la necesidad urgente de respuestas
oficiales.
Fuente:El
Regional del Zulia
